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1. Por escrito presentado en el Registro Civil de L. con fecha 5 de abril de 2002, doña R. nacida en L. el (---) de 1979, con domicilio en la localidad de L., soltera, hija de madre de nacionalidad hindú y padre nacido en Pakistán. de nacionalidad hindú en el momento del nacimiento de la solicitante, y al que le fue concedida la nacionalidad española por residencia con fecha (---) de 1982, Solicitaba le fuera declarada con valor de simple presunción la nacionalidad española, alegando que por la circunstancia de haber nacido en España y haberle sido concedida la nacionalidad española a su padre, le fue expedido el pasaporte español con fecha 10 de enero de 1983, por lo que el desconocimiento de su verdadera situación de derecho la hizo creer que estaba en posesión de la nacionalidad española, prueba de lo expuesto es que en ningún momento ha realizado acto alguno de adquisición voluntaria de otra nacionalidad distinta de la española.
Adjuntaba los siguientes documentos: las siguientes certificaciones expedidas por el Encargado del Registro Civil Central: literal y en extracto de nacimiento del padre de la interesada y literal del matrimonio de los padres; traducción realizada por traductor oficial del permiso de residencia para extranjeros, expedido por autoridad hindú, en el que figura como nacionalidad la española y fotocopia de los pasaportes hindú y español.

2. Ratificada la interesada, el Ministerio Fiscal estimó que en el expediente incoado no se habían acreditado por la interesada las circunstancias exigidas por lo que entiende que no procedía inscribir con valor de simple presunción la nacionalidad española de la promotora.

3. El Encargado del Registro Civil de L. dictó auto con fecha 12 de abril de 2002 desestimando lo solicitado por la promotora, alegando que si bien con arreglo al artículo 18 del Cc en su redacción de 1990 la posesión y utilización de la nacionalidad española durante diez años y con buena fe, puede ser causa de consolidación de la nacionalidad, hay que tener en cuenta que esa posesión y utilización ha de estar basada en un título inscrito en el Registro Civil, por extensión también para la adquisición derivativa se precisa la concurrencia del titulo, que en este caso debiera ser la opción de la interesada en el plazo legalmente establecido, no bastando la referencia a la adquisición de la nacionalidad española en la inscripción de nacimiento de su padre.

4. Notificado el Ministerio Fiscal y la interesada, ésta interpuso recurso ante la Dirección General de los Registros y del Notariado abundando en los mismos razonamientos expuestos en su solicitud. En la tramitación del recurso el Ministerio Fiscal se opuso al recurso formulado, remitiéndose al informe realizado en la tramitación del expediente. El Encargado del Registro Civil remitió lo actuado a la Dirección General de los Registros y del Notariado para su resolución resaltando que el contenido del auto recurrido, no es más que una consecuencia de lo actuado, confirmando la resolución recurrida.

FUNDAMENTOS DE DERECHO

I. Vistos los artículos 18 y 20 del Código civil; 96 de la Ley del Registro Civil; 335 y 338 del Reglamento del Registro Civil; la instrucción de 20 de marzo de 1991, y las Resoluciones de 16-3º y 243º de enero, 21-1º de marzo, 23-3. de abril, 20-1º, 25-2º y 30-3º de mayo y 63º de junio de 2002.

II. La interesada, nacida en España de padres indios el (---) de 1979, ha intentado por este expediente que se declare con valor de simple presunción (cfr. art. 96-2º LRC) que es española de origen.
Su solicitud la basa en el artículo 18 del Código civil, a cuyo tenor ala posesión y utilización continuada de la nacionalidad española durante diez años, con buena fe y basada en un titulo inscrito en el Registro Civil, es causa de consolidación de la nacionalidad, aunque se anule el titulo que la originó».

III. Aparte de que el título inscrito en el Registro Civil no ha sido anulado, lo cierto es que tampoco hay en tal Registro un título idóneo del que se deduzca la adquisición de la nacionalidad española por la interesada.
En efecto de la inscripción de su nacimiento sólo resulta que ella nació india y que su padre adquirió la nacionalidad española por residencia en octubre de 1982. Este hecho no motivaba entonces la adquisición de la nacionalidad española por la hija, sino sólo surgió una opción a esta nacionalidad por razón de patria potestad (cfr. art. 20 Cc) que no se ejercitó en su momento y que ahora no puede ejercitarse porque el plazo para la opción ha caducado.

IV. Por lo demás el hecho de que la interesada haya estado en posesión de pasaporte español durante bastantes años no es ninguna prueba definitiva de que ostente de iure la nacionalidad española, pues la prueba de ésta la ha de suministrar el Registro Civil.

Esta Dirección General ha acordado, de conformidad con la propuesta reglamentaria, desestimar el recurso y confirmar el auto apelado